El décimo intento por definir si la causa abierta contra Javier Cabaña, el exdiputado Ulises Quintana y otras personas se eleva o no a juicio, nuevamente fue fallido.

Gisella Ramírez, una de las coacusadas en el operativo Berilo, presentó una recusación contra el juez de garantías, Miguel Palacios y con esto, la audiencia que debía realizarse a las 8:00 de la mañana quedó suspendida.
Cabañas está imputado por tráfico de drogas, lavado de dinero y asociación criminal, una pesquisa por la cual estuvo preso durante cinco años, tras lo cual, se le otorgó el beneficio de prisión domiciliaria.
Por estos delitos, las expectativas de penas van de 10 a 25 años de cárcel, algo que deberá definirse en un eventual juicio.
Por su parte, Ulises Quintana está procesado por lavado de dinero y asociación criminal. Su participación en el esquema saltó a la luz cuando Cabaña cayó en un operativo policial con USD 190.000, momento en que el entonces legislador habría intervenido para la “liberación”.
Además, la acusación fiscal sostiene que Cucho financió la campaña política de Quintana, quien además habría utilizado los bienes del narcotraficante.
Quintana se expondría a una pena carcelaria de 5 a 15 años, aunque por concurso de delitos, la sentencia podría llegar a 22 años.
El 15 de mayo del 2022, pese a la recusación de 40 fiscales, la Fiscalía presentó acusación contra 24 personas por tráfico de drogas, lavado de dinero y asociación criminal. Fuente: HOY