Una mujer denunció que al visitar la tumba de su madre encontró la lápida violentada y partes óseas aparentemente sustraídas.

Un insólito y preocupante caso de perturbación de la paz de los difuntos fue denunciado en la tarde del pasado martes en el Cementerio Municipal de Encarnación. El hecho fue comunicado a las autoridades alrededor de las 15:15 horas, tras una llamada telefónica recibida en la Comisaría 3°.
De acuerdo al reporte policial, al llegar al lugar los uniformados fueron recibidos por Castorina Miranda de Encina, de 65 años, domiciliada en el barrio Chaipé, quien manifestó que al acudir al sepulcro de su madre observó que la tapa de la tumba estaba violentada.
Además, la denunciante indicó que habría notado el faltante de algunas partes óseas, lo que hace presumir una posible profanación del sepulcro.
Foto: referencial