El streamer Iván Buhajeruk, conocido en las redes como “Spreen,” sorprendió al mundo del fútbol al debutar ayer con el Deportivo Riestra en la Primera División del fútbol argentino.
El joven, de 24 años y con millones de seguidores en plataformas como YouTube y Twitch, ingresó como titular en el partido contra Vélez Sarsfield, líder del campeonato. Sin embargo, su participación fue breve: solo estuvo en el campo durante un minuto sin llegar a tocar el balón, antes de ser reemplazado.
El inesperado debut de Spreen, quien cuenta con 7 millones de suscriptores en YouTube y 10 millones de seguidores en Twitch, generó una oleada de comentarios y críticas en el mundo deportivo.
El delantero de Vélez, Braian Romero, expresó su descontento tras el partido: “Fue una falta de respeto hacia el fútbol. Es un mensaje erróneo que le damos a la sociedad y a los chicos, a los que intentan hasta lo último y no pueden”. Romero agregó que el fútbol se basa en la perseverancia, el esfuerzo y el aprendizaje de los fracasos, y advirtió que este tipo de “atajos” no representan el verdadero camino para alcanzar una carrera profesional.
La polémica también alcanzó las redes sociales, donde figuras del fútbol se pronunciaron al respecto. Juan Sebastián Verón, presidente de Estudiantes de la Plata, calificó el hecho como “una falta total de respeto al fútbol y a los futbolistas” en una historia de Instagram, mientras que Marcos Acuña, jugador de River Plate, compartió su descontento en la misma plataforma.
La decisión de Riestra de incluir a un streamer en un partido de Primera División ha generado un intenso debate sobre el papel de la fama y el marketing en el deporte, dejando abierta la discusión sobre los límites entre el espectáculo y la profesionalización en el fútbol.