Antes del último adiós a Melania Monserrath, comunidad exige separación de forense, juez y fiscal

Antes del último adiós a la pequeña Melania Monserrath, sus familiares, amigos y profesores exigieron justicia y la separación inmediata de sus cargos de la forense, el juez y el fiscal involucrados en el caso de la niña asesinada brutalmente días atrás en Yegros, Departamento de Caazapá.

La comunidad de Fulgencio Yegros, Departamento de Caazapá, en nombre de la niña Melania Monserrath y de todos los niños y de cada víctima que sufrió la negligencia judicial en Paraguay, exigió justicia inmediata y ejemplar.

Asimismo, demandaron la separación inmediata de sus cargos de la forense, el juez y el fiscal involucrados en el caso, por su notoria inoperancia y negligencia en el cumplimiento de sus deberes.

Mira Céspedes, coordinadora del Conservatorio de Música Sonidos del Río Pirapó, leyó un comunicado dirigido a la opinión pública, a las autoridades y a la sociedad en general, para expresar el dolor y la indignación por el brutal crimen de Melania Monserrath, de 11 años, ocurrido días atrás en Yegros, Departamento de Caazapá.

“Hoy la memoria de Melania Monserrath, una niña llena de vida, sueños y talento, alumna del conservatorio de música Sonidos del Río Pirapó se convierte en el grito de un pueblo cansado de la impunidad y la negligencia”, señala el comunicado.

Asimismo, sostiene que Melania fue víctima de un acto atroz que le arrebató la vida y que su muerte, sin embargo, no solo es el resultado de un crimen, sino también de una cadena de omisiones y decisiones inoperantes por parte de quienes juraron proteger y administrar justicia en Paraguay.

“Repudiamos enérgicamente la actuación de la forense que, ante la gravedad del caso, debió solicitar de inmediato una autopsia exhaustiva que determinara las causas y circunstancias de la muerte de Melania. Su falta de celeridad y diligencia ha entorpecido el proceso y sembrado dudas sobre la transparencia de la investigación”, recalca.

También condena la irresponsable decisión del juez que concedió la libertad a una persona que ya había abusado con anterioridad de Melania Monserrath.

“Esta determinación incomprensible y carente de sensibilidad, ha facilitado la comisión de un crimen que hoy lamentamos con profunda tristeza. ¿Cómo es posible que quienes tienen el poder de proteger a las víctimas, las dejen a merced de sus agresores?”, expresa.

De igual manera, manifiesta un total rechazo a la inacción del fiscal, que siendo garante de la legalidad y la persecución del delito, no actuó con la contundencia necesaria para evitar este desenlace fatal.

“La justicia no puede ser selectiva y lenta cuando la vida de una persona está en juego. No queremos otra Melania Monserrath, no podemos permitir que la inocencia de unos pocos siga cobrando vidas inocentes y destruyendo familias”, exclama.

A su vez, asegura que este caso es un doloroso recordatorio de las fallas sistémicas que corroen nuestro sistema judicial y nos sumen en la desesperanza.

“Exigimos justicia inmediata y ejemplar, por ello demandamos la separación inmediata de sus cargos de la forense, el juez y el fiscal involucrados en este caso, por su notoria inoperancia y negligencia en el cumplimiento de sus deberes”, demanda.

También reclama una investigación transparente y expedita que esclarezca cada detalle de la muerte de Melania Monserrath y que garantice que los responsables paguen por sus crímenes, además de la revisión profunda de los protocolos de actuación de los operadores de justicia, con el fin de evitar que tragedias como la de Melania se repitan.

La comunidad también pide el fortalecimiento de las leyes de protección a menores y víctimas de abuso, así como el cumplimiento efectivo por parte de las autoridades.

Entre tanto, señala que el dolor por la partida de Melania Monserrath es inmenso, pero su memoria los impulsa a seguir luchando.

“No descansaremos hasta que la justicia sea una realidad y no una promesa vacía”, manifestó.

“Queremos un Paraguay donde la vida de cada ciudadano sea valorada y protegida, donde la justicia actúe con celeridad y transparencia y donde la impunidad no tenga cabida. Justicia para Melania y para todos”, finaliza el comunicado leído durante el entierro en medio del grito de justicia.

Su madre Griselda Noemí Dávalos Duarte, de 32 años, pidió que se haga justicia y que no haya más muertes de inocentes.

Alrededor de las 17:49 de este miércoles, los restos mortales de Melania Monserrath, de 11 años, fueron despedidos por una multitud entre llantos y gritos de pedidos de justicia.

Con pancartas, pañuelos y globos blancos y una comitiva de la Policía Nacional, la niña fue llevada al cementerio en Fulgencio Yegros, Departamento de Caazapá.

Estaba jugando cuando fue asesinada

El lunes pasado, en horas de la tarde, la niña estaba jugando con barro con sus hermanos y primas cuando en un momento dado, salió de su casa con un baldecito en busca de más arena y ya no regresó.

La autopsia confirmó que falleció a causa de un estrangulamiento. El médico forense Pablo Lemir detalló que el autor del hecho utilizó una fuerza desmedida en el cuello de la pequeña, lo que causó una lesión en las vértebras lo que llevó, a su vez, a un paro respiratorio.

“El autor del hecho lo hizo desde un punto superior al plano de la víctima, se supone que ella estaba arrodillada”, indicó.

El principal sospechoso del hecho fue identificado como Marcelo Giménez, de 24 años, quien fue condenado en el 2022 a cuatro años de cárcel por intento de abuso sexual contra la niña.

El hombre es primo de su madre y había sido beneficiado con libertad condicional en abril pasado. Fuente: UH