La dictadura de Alfredo Stroessner había dado asilo al ex dictador nicaragüense Anastasio Somoza en Paraguay, pero el 17 de setiembre de 1980, hace 45 años, fue asesinado en un atentado en las calles de Asunción, ajusticiado por un comando del Ejército Guerrillero del Pueblo (ERP), lo que dio la vuelta al mundo.

Este miércoles se cumplen 45 años de un atentado ocurrido en Asunción y que golpeó a la dictadura de Alfredo Stroessner, cuando un comando guerrillero del ERP ajustició al ex dictador de Nicaragüa Anastasio Somoza Debayle, quien tenía 54 años de edad y perdió la vida sobre la avenida Generalísimo Franco (actual España) y la calle América, a una cuadra de la avenida Venezuela.
Somoza contaba con “residencia temporal” en nuestro país, tras haber sido derrocado en julio de 1979, por la revolución del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), luego de una sucesión de dictaduras militares que habían empezado con la de su propio padre, Anastasio Somoza García, en la década de 1930 del siglo XX.
Tras haber sido acusado de varios crímenes de lesa humanidad y haberse enriquecido ilegalmente en el poder, perdió el apoyo de Estados Unidos. Luego de buscar refugio en Miami, Bahamas y Guatemala, finalmente viajó a Paraguay.
Con un grupo de familiares y su pareja de ese momento, Dinorah Sampson, viajó a Paraguay, donde fue recibido oficialmente como “residente temporal” y no como exiliado político, dicho por el propio ministro del Interior de la dictadura, Sabino Augusto Montanaro, en una conferencia de prensa para la ocasión.
La Operación Reptil, que ajustició al dictador
Llevaba viviendo en Paraguay por un año, primero en una mansión alquilada sobre Mariscal López casi San Martín y luego sobre la actual España en una más grande y lujosa. Somoza tenía una agenda social activa en bares y restaurantes, y se dedicó a planificar inversiones en tierras, cuando fue objeto del ataque de la Operación Reptil, llevada a cabo por el ERP.
El comando de la guerrilla marxista argentina, conformado por cuatro hombres y tres mujeres, era liderado por Enrique Gorriarán Merlo, quien había combatido con el FSLN para derrocar a Somoza.
Cumplieron su objetivo hace exactamente 45 años, atacando el vehículo Mercedes-Benz en el que iba Somoza. Lo hicieron alrededor de las 10:00 de la mañana, con metralletas, subfusiles, rifles de asalto y un lanzacohetes RPG-7, apoyados por una camioneta.
Además del ex dictador, murieron su asesor financiero, José Baittine, y su chofer, César Gallardo.
El operativo del comando del ERP incluyó alquilar una mansión sobre la actual España, a unas cuadras de la residencia de Somoza y por donde siempre transitaba el Mercedes en cuestión. Se requería de un palco estratégico.
Según la periodista Mónica Zub, autora del libro Somoza en Paraguay, el comando debió convencer a encargados de la agencia inmobiliaria para hacerse con el lugar, asegurando que el famoso cantante Julio Iglesias residiría en la casa.
“Les dijeron que Julio Iglesias iba a venir a Paraguay, que le gustaba mucho el país y que daría un concierto, pero que mantuvieran el secreto”, dijo Zub a Última Hora en un especial tiempo atrás, agregando que el trato se cerró con una promesa a futuro de una foto firmada por el cantante.
Casi todos los integrantes lograron huir del país y se presume que lo hicieron a través de las fronteras de Brasil y Bolivia. El que no lo logró fue Hugo Irurzun, de quien se sospecha murió a causa de las torturas de la policía stronista.
En su momento, el periodista e investigador Antonio Pecci también recordó que el dictador Alfredo Stroessner reaccionó “con un operativo militar casa por casa en Asunción y ciudades aledañas, bajo el convencimiento de que los integrantes del equipo comando se habían refugiado en la zona”.
Se vivió un “ambiente terrorífico”, bajo estado de sitio con el Ejército en las calles y miles de argentinos que vivían en Paraguay fueron interrogados como sospechosos, apuntó a este diario.
La reputación del régimen paraguayo estaba en juego y mostraba que “no era ya invulnerable”. “La facilidad con que actuaron los del comando y escaparon puso en evidencia que el dictador no lo tenía ya todo bajo control”, había dicho el periodista e investigador. Fuente: UH